Multitudinarias marchas en las calles de París durante la noche del martes y la madrugada del miércoles en protesta por la muerte de un joven de 17 años baleado en un control policial. Hubo disturbios, pese a los llamados a la calma por parte del gobierno, informó la prensa local. 

La indignación estalló después de que fuera difundida la grabación del incidente y que las imágenes refutaran la información oficial de la fuerza de seguridad, según la cual el agente policial había disparado al joven debido a que conducía su vehículo en dirección efectivo. En el video se evidencia que, el policía le dispararó a quemarropa al menor cuando intentó darse a la fuga en un vehículo.

En ese contexto, se desplegaron multitudinarias protestas, que en la madrugada del miércoles generaron disturbios. Según informaron medios locales, los manifestantes incendiaron al menos 42 vehículos y maquinarias de obras de construcción. Además, varios agentes resultaron heridos y al menos 24 personas fueron detenidas.

En ese contexto, el Gobierno ordenó el despliegue de 2.000 policías y gendarmes en los suburbios de París, para prevenir nuevos episodios de violencia.

Actualmente, la Justicia está llevando a cabo dos investigaciones, una por homicidio voluntario de una autoridad pública, que involucra directamente al oficial que apretó el gatillo, y otra por saltarse un control policial, que apunta al accionar del fallecido, identificado como Naël. 

La abogada de la familia de la víctima, Jennifer Cambla, criticó que las autoridades juzguen a una persona fallecida, algo que en Francia está prohibido.

El presidente de Francia Emmanuel Macron difundió un mensaje a través de sus redes en el que envió sus condoléncias a la familia de Naël y pidió a los ciudadanos "respeto y tranquilidad". 

"Compartimos la emoción y el dolor de la familia y seres queridos del joven Naël. Quiero decirles nuestra solidaridad y el cariño de la Patria", inició el mensaje del mandatario francés, quien agregó además que "inmediatamente se hizo justicia".

"Nuestros policías y gendarmes están comprometidos con protegernos y servir a la República. Les agradezco todos los días por eso. Lo hacen dentro de un marco ético que debe ser respetado", continuó Macron.

Y añadió: "Corresponde a la Justicia establecer la verdad y asignar responsabilidades. Espero que su trabajo pueda completarse rápidamente". 

"En un contexto así, lo que necesita Nanterre y la Nación es respeto y tranquilidad", cerró en pedido a la ciudadanía.