

Después de varios meses desde el fallecimiento de Liam Payne, ocurrido el 24 de octubre de 2024 tras caer de un hotel en el barrio porteño de Palermo, finalmente se supo quién se quedó con su fortuna. El cantante, conocido mundialmente por ser parte de One Direction, no había dejado un testamento, lo que requirió un proceso para definir el destino de sus bienes.
Según trascendió, el músico tenía una fortuna valuada en alrededor de 32 millones de dólares. La ausencia de un testamento claro hizo necesaria la intervención legal para determinar cómo se administrarían esos fondos.
La resolución indica que la fortuna de Liam Payne será administrada por su exmujer, Cheryl Cole, en beneficio del hijo que tuvieron en común, Bear, de 8 años de edad. De esta manera, se asegura que el patrimonio del artista quede resguardado para el futuro de su hijo. En cuanto a su última pareja, Kate Cassidy, no tendría derecho a reclamar nada de la fortuna y, según los reportes, tampoco estaría interesada en hacerlo.
Liam Payne tuvo una exitosa carrera que comenzó en "The X Factor" y lo llevó a la fama global con One Direction, para luego continuar como solista. Fue padre de Bear con Cheryl Tweedy (ahora conocida como Cheryl Cole). Sin embargo, también fue público que atravesó conocidas luchas con la ansiedad, la agorafobia y la adicción al alcohol, problemas sobre los que habló abiertamente, incluyendo su paso por rehabilitación y esfuerzos por mantenerse sobrio.