

En este caso, la llegada de un nuevo préstamo del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la eliminación del cepo cambiario por parte del gobierno de Javier Milei podrían estar generando efectos similares.
El gobierno de Milei ha anunciado un acuerdo con el FMI por US$ 20.000 millones, con un desembolso inicial de US$ 12.000 millones, destinado a fortalecer las reservas del Banco Central y respaldar la liberalización del mercado cambiario . Sin embargo, estos fondos no se utilizarán para intervenir en el mercado cambiario ni para estimular la economía, sino para cancelar deudas previas, incluidas las obligaciones con el propio FMI y el Banco Central .
El término "mal holandés" describe una situación en la que un aumento significativo de ingresos por exportaciones de recursos naturales provoca la apreciación de la moneda local, encareciendo las exportaciones de otros sectores y debilitando la industria nacional. En el contexto argentino, la entrada de divisas por exportaciones agroenergéticas y financiamiento externo podría generar una sobrevaluación del peso, afectando la competitividad de sectores no relacionados con los recursos naturales .
El lunes 14 de abril, el gobierno de Milei eliminó las restricciones al dólar, implementando un esquema de bandas cambiarias que permite al peso fluctuar entre 1.100 y 1.400 por dólar, con ajustes mensuales del 1% en ambos límites. Esta medida, celebrada como un "día de liberación", busca terminar con la distorsión del mercado cambiario y atraer inversiones.
Sin embargo, críticos como el exministro Martín Guzmán advierten que la abrupta eliminación del cepo podría generar una "bicicleta financiera" insostenible, exacerbando la volatilidad. El riesgo de una fuga de capitales persiste, especialmente tras años de controles estrictos que acumularon dólares en el colchón de los ahorristas.
Milei proyecta que la inflación desaparecerá en la segunda mitad de 2026, gracias al freno a la emisión monetaria y al superávit fiscal primario (1.6% del PBI en 2025). No obstante, el ajuste ha tenido costos sociales: recortes en subsidios, pensiones y empleo público, que ya generan protestas.
La eliminación del cepo podría agravar la inflación en el corto plazo, especialmente si el peso se deprecia más allá de la banda. Economistas como Leonardo Piazza anticipan un "shock inflacionario" en el segundo trimestre, aunque el gobierno insiste en que la tendencia es descendente
En este contexto, la estrategia del gobierno de Milei podría estar reproduciendo los efectos del mal holandés, al depender de ingresos externos para sostener la economía, mientras se descuida el desarrollo de sectores productivos clave. La falta de una estrategia clara para reducir la deuda y mejorar la competitividad económica podría perpetuar la dependencia financiera y limitar la autonomía económica del país.
Es fundamental que el gobierno considere políticas que fomenten la diversificación de la economía y el fortalecimiento de sectores productivos, para evitar caer en una trampa de dependencia de ingresos externos y asegurar un crecimiento económico sostenible.