Brito explicó que la salida de Mastantuono, a quien considera "una de las apariciones más importantes de los últimos 20 o 30 años en Argentina", se enmarca en la naturaleza de una cláusula de rescisión. "Lo primero es hablar de la persona", señaló, indicando que las transferencias se concretan cuando el futbolista expresa su interés en jugar en la nueva institución.
El presidente de River detalló que un pase en el fútbol implica "recibir dinero a cambio de rescindir un contrato" y requiere necesariamente un "acuerdo del jugador para hacer un convenio laboral con el club al que está yendo".
Aunque la cláusula limite la capacidad de negociación, Brito afirmó que desde River se busca "defender los intereses del club hasta el último momento" e intentar retener al jugador lo máximo posible. Ejemplificó con las ventas de Julián Álvarez y Claudio Echeverri al Manchester City, donde se logró mantener a Álvarez por seis meses y al "Diablito" por un año después de sus respectivas transferencias. En el caso de Mastantuono, la intención es aplicar una estrategia similar y retenerlo por algunos meses más.
Sobre las cláusulas de rescisión, Brito remarcó que son una condición por la cual el jugador "tiene derecho de darle un resarcimiento al club para poder irse libre a otro club", siendo este monto financiado por el club comprador y una situación que la institución de origen "no puede manejar". Finalmente, destacó que estas cláusulas se negocian con los representantes, buscando "montos que no sean abusivos y permitan la salida del jugador en algún valor que sea redituable para el club", y que la de Mastantuono se firmó "bastante antes" de su debut en Primera División.