Los jueces Esteban Viñas y Gastón De Marco tomaron la decisión, permitiendo que Anselmini, culpable de secuestrar, torturar, abusar y asesinar a la menor, pueda abandonar la cárcel un domingo cada quince días, tras haber cumplido con los requisitos de tiempo en prisión y recibir informes positivos del Servicio Penitenciario.

La resolución ha sido ampliamente repudiada, especialmente por la familia de Natalia Melmann, que ha decidido apelar la medida. Debido a esta apelación, Anselmini no podrá disfrutar de las salidas transitorias hasta que la Cámara de Casación Penal de la provincia se pronuncie al respecto.

Cabe recordar que en enero de 2023, la Sala II de la Cámara de Apelación y Garantías marplatense ya había rechazado un pedido de libertad condicional presentado por Anselmini. En esa ocasión, el voto estuvo dividido, y el juez Esteban Viñas, quien ahora apoya las salidas transitorias, había sido el único en votar a favor de concederle la libertad.

El Crimen de Natalia Melmann

El caso que conmocionó a la comunidad ocurrió el 4 de febrero de 2001, cuando Natalia Melmann fue secuestrada por policías bonaerenses, llevada a una casa en el sur de Miramar, y allí fue torturada, abusada sexualmente y estrangulada. Su cuerpo fue encontrado días después en el vivero Florentino Ameghino, oculto bajo un montículo de hojas.

En septiembre de 2002, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de Mar del Plata condenó a reclusión perpetua a los policías Oscar Echenique, Ricardo Suárez y Ricardo Anselmini por su participación en el atroz crimen. Otro implicado, Gustavo “Gallo” Fernández, fue condenado a 25 años de prisión, aunque su pena fue reducida posteriormente.

En 2018, un nuevo juicio llevó a la condena de otro policía, Ricardo Panadero, quien inicialmente había sido absuelto pero fue condenado en un segundo juicio en 2023, recibiendo también una sentencia de prisión perpetua.

Este nuevo capítulo en el caso de Natalia Melmann reaviva el dolor y la indignación de su familia y de la sociedad en general, que continúa exigiendo justicia plena para quienes cometieron uno de los crímenes más aberrantes en la historia reciente de la región.