

Aunque la variación de precios en algunos sectores muestra desaceleración, las subas continúan en servicios esenciales y bienes de consumo.
Alquileres: Los contratos firmados bajo la derogada Ley de Alquileres tendrán una actualización anual del 46,1% en base al Índice de Contratos de Locación. Este valor representa una desaceleración respecto a meses anteriores.
Colectivos y Subte (AMBA): El transporte público en CABA y Provincia de Buenos Aires aumentará un 3,9%.
El pasaje de colectivo con SUBE oscilará entre $526,13 y $707,26, según la distancia y jurisdicción.
La nueva tarifa del subte pasará de $1.071 a $1.112,76.
Colegios Privados (CABA): Los establecimientos con subvención estatal en la Ciudad de Buenos Aires aplicarán un aumento del 2,1% en sus cuotas. Los colegios en la Provincia de Buenos Aires no han informado nuevos ajustes.
Prepagas: Los planes de salud privados registrarán una suba que rondará entre el 1,1% y el 2,4%, variando según la empresa, el plan y la región, en sintonía con la desaceleración de la inflación general.
Combustibles: El precio de la nafta y el gasoil subirá debido a la actualización prevista del impuesto a los combustibles líquidos y al dióxido de carbono. El incremento se aplicará de forma directa y sin aviso previo.
Servicios Públicos: Las tarifas de electricidad, gas natural y agua continuarán con sus actualizaciones mensuales, tomando como referencia la inflación. Sin embargo, el impacto en las facturas podría ser menor debido a la estacionalidad del consumo (menos uso de calefacción).
Telecomunicaciones: Las compañías de telefonía celular, internet y cable aplicarán nuevos aumentos que rondan el 3%, continuando con las actualizaciones mensuales tras la desregulación del sector.