

Los detenidos son:
Ariel Giménez: Acusado de haber sido contratado para cavar el pozo séptico donde fueron enterradas las víctimas. Su detención se logró tras operativos en Florencio Varela y con el testimonio clave de vecinos.
Lázaro Víctor Sotacuro: Ciudadano boliviano señalado como el conductor de la camioneta blanca que se usó para trasladar a las jóvenes y a los miembros de la banda narco. Fue capturado en un hostel en Villazón, Bolivia, tras cruzar la frontera de manera ilegal, y ya fue trasladado al penal de Ezeiza en Buenos Aires.
Ambos serán formalmente imputados en la causa. Se estima que la acusación principal contra ellos será por el delito de encubrimiento agravado, a pesar de los diversos roles que cumplieron. Mientras tanto, la policía intensifica la búsqueda de otros seis acusados, incluido el presunto autor intelectual del hecho, el narco peruano Tony Janzen Valverde Victoriano, alias "Pequeño J", quien tiene pedido de captura nacional e internacional.