

A más de una década de su muerte, la figura del exlíder de Soda Stereo se ha convertido en un mito. Canciones como "Persiana americana" y "De música ligera" siguen siendo himnos que trascienden fronteras. Como cada año, su tumba en el Cementerio de la Chacarita se convirtió en un lugar de peregrinación, donde cientos de seguidores de diversas nacionalidades se acercaron para dejar flores, cartas y escuchar su música.
"Es como venir a saludar a un amigo, un familiar. Cerati es alguien que está dentro de todos nosotros", expresó entre lágrimas un fanático, mientras otra seguidora chilena, que viajó especialmente para la fecha, recordó la importancia de Soda Stereo para su generación.
La cuenta oficial de Instagram de Cerati también se sumó al homenaje, compartiendo una emotiva frase de su tema "Cactus": "Y cuando te busco, no hay sitio en donde no estés". En Buenos Aires, murales, un paso bajo nivel y otros homenajes espontáneos se sumaron al tributo.
Gustavo Cerati falleció el 4 de septiembre de 2014, a los 55 años, después de permanecer más de cuatro años en coma. Su muerte conmocionó a todo el continente, y en Argentina se decretaron dos días de duelo nacional.
Fundador de Soda Stereo en 1982, Cerati llevó al trío a la cima de la música latina. Tras la disolución de la banda, desarrolló una prolífica y vanguardista carrera solista, consolidando su figura como un artista fundamental de la música iberoamericana. Su último álbum, "Fuerza natural", es considerado una de sus obras maestras.
A 11 años de su partida, su arte sigue vivo. Su legado, eterno. Y como él mismo dijo: "Gracias… totales".