

En la nota, la candidata destaca la figura de su padre, el ya fallecido Julio Blanco, un reconocido utilero de los clubes Rivadavia y Villa del Parque. "Mi llegada al básquet fue un camino de ida, y sin dudas que mi papá tuvo todo que ver", aseguró emocionada.
Silvia relató cómo su camino en el básquet comenzó en 2006 como hincha de Villa del Parque, para luego pasar a ser planillera y, con el tiempo, presidenta de la comisión de básquet del club. En 2014, tras la renuncia del presidente de la asociación local, asumió la presidencia, una responsabilidad que, según sus palabras, fue "brava" debido a los graves problemas económicos.
A pesar de las dificultades, Silvia recuerda con emoción los logros de su gestión, como el zonal de primera que la asociación logró después de 29 años, un éxito que, destaca, fue gracias a la "buena comunión" entre los clubes.
Aunque su pasión por el básquet está ahora postergada por la política, Silvia Blanco ya tiene en mente proyectos para impulsar desde el Concejo Deliberante. "Muchas de nuestras propuestas tienen que ver con el empleo y la juventud, y también con fomentar desde el Estado la participación de los chicos en los clubes", adelantó.
Uno de sus proyectos más concretos es lograr que el sector privado se involucre en los clubes para que los jóvenes no se queden sin jugar por cuestiones de distancia.
Con su trayectoria y su pasión por el deporte, Silvia Blanco busca demostrar que su experiencia y su capacidad de gestión pueden marcar una diferencia en la política.