

El caso del juez Maraniello ha cobrado relevancia luego de que su decisión de prohibir la difusión de los audios fuera calificada como un acto de "censura previa" por parte de periodistas y opositores. Ahora, su prontuario judicial revela un patrón de conducta aún más grave.
Las denuncias, presentadas por la Asociación de Empleados y Funcionarios del Poder Judicial (AEPJN), detallan casos de acoso sexual y laboral. Una de las denunciantes relató que el juez la presionó para salir con él, y que, ante su negativa, la acosó físicamente y la obligó a tener relaciones sexuales. Otra empleada judicial confesó que el magistrado le enviaba mensajes inapropiados, hacía comentarios sobre su vestimenta y físico, y que el trato hostil la llevó a requerir medicación y a tener pensamientos suicidas.
El expediente fue derivado a la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM), donde la fiscal Mariana Labozzetta determinó que los hechos podrían constituir delitos. El caso se encuentra ahora en manos de la jueza federal María Servini y el fiscal Carlos Stornelli.