

El informe de ADIMRA subraya que, a pesar del mínimo repunte, la industria metalúrgica se encuentra en una situación de estancamiento. El uso de la capacidad instalada sigue una caída constante, ubicándose en un preocupante 45.2%.
Al analizar el desempeño por subsectores, se observaron tendencias dispares. Algunos estratégicos como autopartes (-2.9%) y Bienes de Capital (-1.8%) registraron caídas. Por el contrario, los segmentos de Maquinaria Agrícola y de Carrocerías y Remolques mostraron incrementos de hasta el 17.7%. Excluyendo estos sectores específicos, el resto del entramado metalúrgico exhibe una caída del 1% interanual, lo que indica una falta de dinamismo generalizada.
El presidente de ADIMRA, Elio Del Re, expresó su preocupación: "la industria local muestra señales de estancamiento y en niveles productivos muy bajos, a lo que se suman las importaciones con porcentajes históricos récord". Del Re fue crítico con la política de apertura: "La apertura indiscriminada promete precios bajos a corto plazo, pero sale caro a futuro". Y puso como ejemplo "la habilitación, sin criterios técnicos, de maquinaria usada: se bajan los estándares, se erosiona la competitividad y se pierde empleo local".
En el ámbito provincial, Santa Fe (4.8%) y Entre Ríos (3.6%) reportaron variaciones positivas, impulsadas principalmente por la actividad de maquinaria agrícola. Sin embargo, provincias clave como Mendoza (-4%), Córdoba (-2.4%) y Buenos Aires (-1.4%) mostraron caídas interanuales, reflejando las dificultades para consolidar una recuperación firme.
En cuanto al empleo, la situación es igualmente desafiante. Se registró una disminución interanual del 1.9% y, en comparación con junio, se encuentra un 0.1% por debajo, confirmando la contracción en la generación de puestos de trabajo en el sector.