

La intimación formal fue notificada este lunes 18 de agosto, desatando la máxima alerta en la dirigencia azulgrana. El expediente 148/2025 marca un antes y un después para la institución de Boedo, que ya venía arrastrando serios problemas económicos y múltiples inhibiciones que le impidieron reforzarse en los últimos mercados de pases.
El juez de Cámara fue categórico: de no acreditarse el pago antes del próximo viernes, la medida se ejecutará y San Lorenzo ingresará en un proceso judicial cuyas consecuencias son imprevisibles para su patrimonio y su vida institucional. A pesar de la urgencia, el club ha manifestado su intención de apelar la decisión.
Especialistas en derecho deportivo y finanzas advierten que una declaración de quiebra no solo pondría en riesgo el control administrativo de la institución, sino también su participación en competencias oficiales. Esto podría derivar en graves sanciones deportivas y la potencial pérdida de activos esenciales, comprometiendo seriamente el futuro del club.
En este delicado contexto, la sede de Avenida La Plata 1782 fue escenario de un nuevo episodio de tensión. Marcelo Moretti, presidente en uso de licencia, se presentó acompañado de un escribano con la intención de resolver "cuestiones legales". Sin embargo, su ingreso le fue denegado por orden del secretario general Martín Cigna, con quien mantiene un fuerte enfrentamiento.
La inesperada aparición de Moretti, quien actualmente está bajo investigación por presuntas coimas en el fichaje de un juvenil, reavivó los rumores sobre su posible regreso a la presidencia. No es la primera vez que el presidente en licencia aparece en momentos clave para el club; ya en las semifinales del Torneo Apertura 2025, frente a Platense, había intentado ingresar al palco presidencial del estadio Pedro Bidegain, siendo retirado por la propia dirigencia.
Esta insistencia mantiene en vilo a la Comisión Directiva, donde incluso se especula con la renuncia de Julio Lopardo si Moretti logra ser restituido por el Tribunal de Ética de la AFA.
En medio de una incertidumbre palpable, socios e hinchas de San Lorenzo aguardan con angustia las novedades sobre gestiones de último momento que puedan evitar el peor escenario. El futuro inmediato del "Ciclón" pende de un hilo: conseguir los más de cinco millones de dólares reclamados por el fondo suizo en los próximos días será la única variable para evitar el colapso.