

Las declaraciones de Caputo, que sugerían haberes cercanos al millón de pesos para un segmento significativo de jubilados, chocan de frente con las estadísticas oficiales. De un total de 7.379.478 beneficiarios previsionales, solo 1.235.318 jubilados (aproximadamente el 17%) cobran más de dos haberes mínimos. Esto significa que la inmensa mayoría, el 64%, percibe la jubilación mínima o incluso menos, quedando muy por debajo del umbral del que habló el ministro.
El promedio general de haberes jubilatorios en el sistema, incluyendo tanto a quienes se jubilaron con aportes completos como con moratorias, rondaba los $642.000 para hombres y $588.000 para mujeres, cifras que incluyen los ajustes por inflación hasta mayo. Estos montos contrastan fuertemente con la media de $900.000 proyectada por Caputo para los aportantes.
Las cifras oficiales confirman que más de 6 millones de beneficiarios, lo que representa un abrumador 84% del total, cobran menos del doble de la jubilación mínima. Esta situación obliga a la gran mayoría de los jubilados a depender de los bonos extraordinarios que se otorgan para complementar sus ingresos, evidenciando que el haber básico es insuficiente para cubrir las necesidades más elementales.
La discrepancia entre los datos presentados por el ministro de Economía y la realidad reflejada en las cifras del SIPA pone de manifiesto la crítica situación económica que atraviesa la mayoría de los adultos mayores en Argentina, lejos de cualquier promedio que pueda sugerir una bonanza previsional.