

Nicolás subrayó que "hay fines de semana que arrojan situaciones preocupantes" en relación a la gran cantidad de vehículos incautados. Hizo hincapié en que circular sin licencia anula la cobertura de cualquier seguro, dejando a los conductores y posibles víctimas en una situación de vulnerabilidad extrema.
Otro punto crítico en el control vial es la recurrencia de la alcoholemia positiva. El director mencionó un caso alarmante de una conductora hallada dormida con casi 2.0 de alcohol en sangre, lo que demuestra el alto riesgo para la seguridad vial.
Asimismo, Nicolás enfatizó el significativo impacto económico y operativo que los accidentes de tránsito representan para el municipio. "Cada accidente implica movilizar ambulancias, Defensa Civil, Tránsito y atención hospitalaria, lo cual representa un costo altísimo para el Municipio", detalló.
En cuanto a las infracciones más cotidianas, el mal estacionamiento sigue siendo muy frecuente, incluso en zonas sensibles como las inmediaciones de escuelas. El funcionario reflexionó sobre la contradicción de educar a los hijos en el respeto mientras los adultos no dan el ejemplo en normas básicas de convivencia vial.
A pesar de estas problemáticas, Sergio Nicolás destacó la intensificación de la presencia en calle y los operativos, lo que ha permitido un mayor control. Como resultado, se han observado mejoras en sectores céntricos, como el orden en los estacionamientos de motos.
"Hoy podemos decir que tenemos un tránsito más ordenado, pero no nos conformamos. Vamos a seguir trabajando para que los accidentes dejen de ser noticia", concluyó Nicolás, reafirmando el compromiso del área con la seguridad vial del distrito.