

La suspensión de Julieta Makintach rige desde este miércoles y se extenderá por un período de tres meses, hasta agosto. La medida fue confirmada por el abogado Rodolfo Baqué, defensor de una de las involucradas en el juicio, la enfermera Dahiana Gisela Madrid.
La decisión de la Suprema Corte, con la firma de su presidenta Hilda Kogan y los ministros Sergio Gabriel Torres y Daniel Fernando Soria, se basa en un análisis inicial que advierte las "características inusitadas" de la participación de Makintach en un film o video, supuestamente documental, relacionado con el proceso penal. Este actuar, según el dictamen, sería "inconciliable con el decoro y la prudencia" que se exige a los servidores del poder judicial, y contrasta "abiertamente con el desempeño responsable de la jurisdicción".
Makintach quedó bajo la lupa luego de que se difundieran varios videos donde se la observaba caminando por los tribunales de San Isidro, seguida por un camarógrafo, y luego hablando sobre el caso. La magistrada fue denunciada tras detectarse la presencia de al menos dos personas no autorizadas para observar los alegatos ni realizar filmaciones dentro de la sala.
Aunque en un principio Makintach negó su vínculo con la productora a cargo del documental (en la que estaría involucrado su propio hermano), las pruebas recabadas por la fiscalía fueron determinantes para su separación del caso y posterior suspensión. La Suprema Corte ha dispuesto trasladar la resolución al Procurador General para que evalúe la conducta de Makintach en los términos de la Ley N° 13.661, lo que la expone a un posible enjuiciamiento.