

Los Estados Unidos de América han tenido una cruel historia con las comunidades de origen asiático. Con la propagación del COVID-19 y la asociación pública con Wuhan, China, los Estados Unidos han visto un incremento en crímenes de odio anti-asiáticos el último año. El lunes 16 de marzo ocho personas fueron asesinadas en el área de Atlanta, teniendo como objetivo mayormente mujeres de descendencia asiática. Esto despertó un llamado de atención y una búsqueda de apoyo de otras comunidades, entre ellas, una de las primeras en salir a hablar fue Bandai Namco.
As a company based in Japan, the recent rise in anti-Asian hate has truly hit home for our employees.
— Bandai Namco US (@BandaiNamcoUS) March 16, 2021
We always appreciate support from our fans and we now ask for your support to #StopAsianHate and fight the rise in hate crimes committed against people of Asian descent. pic.twitter.com/QlUUryZZfx
Bandai Namco tiene presencia en muchos lugares del mundo, con sagas de juegos como lo son Street Fighter, la saga de Tekken, la saga de Super Smash Bros, los juegos de Dragon Ball y otros más, pero su base está en Japón. Debido a eso, el crecimiento de crímenes raciales “golpeó en casa” para varios miembros del equipo de Bandai, utilizando el hashtag #StopAsianHate para incrementar la visibilidad del problema, el estudio dijo lo siguiente:
“Bandai Namco Entertainment America se mantiene comprometida con los ideales de inclusión, diversidad y justicia; mientras condenamos todo acto de violencia, bullying, discriminación y xenofobia.”
El anuncio continúa, diciendo “Nos levantamos en solidaridad con la comunidad AAPI (Asian American and Pacific Islander), nuestro culturalmente diverso e inclusivo equipo de trabajadores, jugadores y fans de todas las culturas y trasfondos, nuestras familias y especialmente nuestros mayores. Hablemos y creemos conciencia contra el terrible crecimiento de crímenes y agresiones anti-asiáticas.”
Los crímenes Anti-Asiáticos han visto un incremento de más de 1900% (https://time.com/5938482/asian-american-attacks/) desde el comienzo del COVID-19, incluyendo violencia física y actos de vandalismo. Esto necesita cambiar.